Los motivos por los que hasta el momento no se logra el “Dream Act”, no descansan en los republicanos porque supuestamente son los renuentes, los intransigentes los racistas y todo el tanatal de adjetivos que se han ganado a través de la historia. Ni tampoco se le puede dar los créditos a los demócratas por apoyar la propuesta, porque estos, con tal de quedar bien, le dicen sí a todo aunque en el fondo saben que están mal.
El problema no esta en el Congreso….simplemente el meollo del asunto, descansa en los dirigentes y quienes se han tomado la responsabilidad de escribir y documentar las propuestas, porque todas han carecido de razones y objetividad. Si revisamos detenidamente cuales son las razones por las que se pide la aprobación de un status legal para cientos de miles de estudiantes que viven aquí sin documentos bajo el Dream Act, fácil nos podemos dar cuanta que carecen de objetivos.
De igual forma ha pasado con el TPS para los guatemaltecos…. ¡Absolutamente todos sin objetivos!... De manera pues, que mientras los que se han echado el compromiso de hablar por los menos afortunados no tengan argumentos claros con que documentar sus demandas en un país litigante como Estados Unidos, sencillamente, todos los esfuerzos irán a parar derechito a la basura.
En el caso de Guatemala, el único culpable de la tragedia que hoy vivimos es el Estado guatemalteco porque es el obligado a proteger la soberanía de nuestro país. Hace tres años la Casa de la Cultura de Guatemala en Los Angeles presento a la entonces viceministra de Relaciones Exteriores Marta Altolaguirre la demanda colectiva en contra de la United Fruit Company. Según Altolaguirre, por órdenes del presidente Oscar Berger, dicha demanda no era conveniente darle trámite, a pesar de que contaba con todas las razones y objetivos. ¿Por que?..... Habrá que preguntárselo al ex presidente.
CASA DE LA CULTURA DE GUATEMALA